el uno para el otro

Feliz medio siglo, mi querido Sergio Víctor.. (en escala de SOL)

Si bien es cierto que nos presentaron formalmente sólo hace 22 años, siento que te he acompañado durante toda tu vida. Estoy casi casi segura de haber subido más de alguna vez las largas escaleras de Sewell... de haber tomado el tren hacia San Fernando en aquellas frías tardes... de haber recorrido las calles del puerto pegadita a tu espalda.

Pero sabes que es lo más chori? Que nuestra relación es de otra galaxia. Y es que yo realmente me pregunto: ¿Cuantos padres se comunican con sus hijos a través de un sueño, cuando estos aún se encuentran en el vientre materno?. Viste que somos afortunados, papito!!. Porque gracias a ese episodio descubriste que tu sitio era junto a nosotras. Que estábamos destinados a recorrer esta vida juntos, de la mano. Y pucha que me gusta caminar junto a ti.

Definitivamente eres el hombre más especial en mi existencia. Te lo había dicho? No es que sea un problema el expresártelo diariamente, pero doy por hecho (he ahí el drama) que lo tienes más que asumido. En todo caso, nunca es tarde para enmendar los errores .

Tan sólo espero que nuestro andar no acabe todavía. No sabes lo difícil que se me haría todo esto sin ti. Aparte, nos queda mucho por recorrer, explorar, descubrir... te falta conocer a mis hijos, y ojalá que también a los hijos de estos. Y prepárate, que pienso tener varios ¬¬

Te requete contra adoro viejo (mi queridísimo viejo), así ultra mamonamente hablando
un beso gigante a la distancia, el que porsupuestamente te entregaré apenas me baje de ese maldito bus.
Con todo el amor del mundo,
tu pequeña eternamente,
Tu Silvia Daniela.